miércoles, 27 de junio de 2007

Sobre la historiografía de la Guerra Civil (I)

La lectura de un artículo recientemente escrito por mi amigo Imperator me ha llevado a tomar la decisión de profundizar un poquito más en el asunto, con el ánimo de aclarar o cuanto menos no entorpecer el estudio de un periodo tan importante de nuestra Historia Contemporánea -Guerra del 36- (todavía hoy estamos viviendo secuelas de aquel conflicto, que hunde sus raíces en los albores de nuestro siglo XIX) y mostrar las herramientas necesarias para entender y comprender un debate que en los últimos años ha producido tal cantidad de libros que supera con creces cualquier otra producción bibliográfica del resto de las ciencias sociales y humanísitcas.

Se refiere el mencionado artículo, a uno de los historiadores más prestigiosos y a la vez difamado y perseguido, como es D. Ricardo de laCierva y de las Hoces, maestro de historiadores que fue, en la por aquel entonces llamada Facultad de Letras y Filosofía de la Universidad de Murcia, hoy docente retirado, dueño de su propia editorial, y colaborador habitual en seminarios como la revista Época.
Conocedor del periodo histórico como ningún otro (por supuesto bastante mejor que aquella banda de "historiadores" británicos que creen estar en posesión de la verdad absoluta, despreciando cualquier cosa que se salga de los límites perfectamente marcados por ellos y su escuela historiográfica -marxismo histórico, o como prefieren ellos, materialismo histórico-), Ricardo de la Cierva cuenta en su haber con una amplísima lista de estudios e investigaciones que nos ofrecen un significativo repertorio de obras donde acudir para iniciar nuestras averiguaciones sobre el conflicto civil.

Otro de los grandes historiadores, encuadrados generalmente en la derecha, ha sido el general Casas de las Vegas, testigo de excepción de la época, y que ha escrito y reflexionado sobre el asunto, con fuentes de primera y con opiniones que a casi nadie deja indiferente. Entre sus obras sobresalen títulos tan destacados como Errores militares en la Guerra Civil 1936-1939 o Franco Militar, estudios de una eminente historia militar.

También cuenta la historiografía sería sobre la Guerra Civil, con los hermanos Salas Larrazabal, con sus dos obras magnas sobre el estudio de la aviación en la contienda (Historia del Ejército popular de la República), y la investigación minuciosa sobre el ejército popular (Historia del Ejército popular de la República). Dos obras de obligada referencia en el estudio de la Guerra.

Y como no nombrar los siete volúmenes de Arrarás (tachado de fascista por le propio Moradiellos -uno de los jefecillas marxistoides- por sus críticas a siempre laureado Azaña) en su magnífica monografía sobre Historia de la Cruzada española. También significativa es la obra sobre la Segunda República, de la que hoy, quien verdaderamente desea acercarse a la Historia con la sana intención de conocer y comprender, ha de estudiar.

Otro de los grandes historiadores de los que toman ejemplo Pio Moa entre otros (y no de D. Ricardo de la Cierva como afirma mi amigo Imperator) es el genial Martínez Bande, que desde sus estudios de la Guerra a través de distintos frnetes, ofrece una visión muy ajustada y casi siempre silenciada por la historiografía "oficial".
Y por último, aunque nos daría para un par de artículos más (sin olvidarme de S. G. Payne), quiero nombrar a un joven historiador, Ángel David Martín Rubio y su obra de investigación sobre la represión en el conflicto, que trata de ajustar las desmesuradas cifras que de manera intencionada muestran numerosos estudios (subvencionados con dinero público) donde se repiten tópicos como aquellos del millón de muertos y de los cientos de miles de represaliados.

La minuciosidad de los datos, las fuentes utilizadas, sus análisis y precisiones, hacen de todas estas obras mencionadas, una referencia fundamental para quien no se contente con la historia "políticamente correcta" de los que desde sus sillones de catedráticos, se creen en el deber de impartir justicia y censurar todo lo que se salga de sus límites sectariamente marcados.

6 comentarios:

El Cerrajero dijo...

Una entrada muy interesante.

P.D. Ya he incluido un enlace a tu blog desde el mío.

Javier dijo...

Creo que sería de justicia incluir en la lista de los historiadores que trataron nuestra guerra al historiador de La Armada D. Ricardo Cerezo Martínez, sus estudios sobre la misma son francamente meritorios y totalmente objetivos.

Un abrazo.

Imperator dijo...

Gracias por la cita en tu artículo, aunque, logicamente, tu debes de saber más del tema, por aquello de la no siempre "deformación" profesional.

Un saludo.

Critón dijo...

En primer lugar gracias Cerrajero, por enlazarme desde tu blog. Espero que el artículo sirva cuanto menos para hacernos una ligera idea e la gran cantidad de historiadores que se han dedicado al estudio serio y riguroso de la Guerra Civil (muchos de ellos silenciados por los "historiadores-oficiales") y las numerosas interpretaciones y líneas de investigación que surgen.

Muchas gracias por la aportación de Javier. Sin duda, Ricardo Cerezo es un gran historiador de la historia naval y militar (recordamos su magna obra sobre la Armada de Felipe II o sobre la Marina en el 98 -obras fundamentales en cualquier estudio total de la época que tratemos).

Gracias a tí Imperator y a tu artículo, ya que fue el "live motive" de ésta pequeña recensión bibliográfica sobre la Guerra, que veo está teniendo cierto interés.

Un saludo a todos.

lalet dijo...

ola, soy licenciado en historia, y me ha llamado mucho la antención tu artículo. En la carrera al hablar de la historiografia de la II república y la guerra civil, al inicio se citan nombres de autores de escasa relevancia, o con contenidos muy atrasados, y curiosamente son todos los que has nombrados: De la cierva, Pio Moa, Larrazabal... Después se hace mención a los primeros hispanistas, principalmente británicos y no necesariamente marxistas como el caso de G. Brenann, como base del conocimiento científico, con algunas limitaciones y errores como el mito del millón de muertos, para terminar con los hispanistas más modernos (G.H. Peyne, Preston, Hobsbawm, P. Vilar)y aportaciones de autores nacionales inspirados en parte por estos investigadores, pero que no tienen por que ser de izquierdas como J. Tussel o Paredes. Por ultimo destacar que para mí gusto el mejor análisis realizado por una autor español, es el de Tuñon de Lara, insigne republicano exiliado, pero que sobretodo, sabe sintetizar lo mejor del analisis marxista británico, el estudio social de los analistas franceses y una praxis investigadora y docente impecable. Un saludo.

Critón dijo...

Bien, vayamos por parte. No me resulta extraño que al ser Licenciado en Historia, estos nombres de historiadores te resulten de escasa relavancia. Eres producto de la Universidad española, producto de lo que los marxistas o materialistas históricos hacen en clase: dogmatizar. Sabedores de que han conseguido que la Universidad sea el último reducto de su poder e influencia, cultivan el escepticismo hacia todo lo que no sea como ellos.

Segundo: los "contenidos" no son atrasados, en todo caso, las interpretaciones. Y que que te voy a decir de interpretaciones pasadas, que más de uno de los que citas (Preston, Hobsbawm entre los más significados) saben bastante. Ambos, especialmente el segundo(porque el primero o desconoce parte de la Historia de España o se la inventa -como demostró R. de la Cierva) analizan la historia desde las ya caducas coordenadas del materialismo histórico. Y a ver si os enterais de una vez, que la época dorada de la vieja escuela marxista ya pasó (para ello te recomiendo una gran obra de J. Fontana, padre del materialismo histórico español, pero que supo captar a la perfección el cambio que supuso el fin de los postulados hegemónicos del marxismo "La Historia después del fin de la Historia"-perdona que lo entrecomille-).

No me extraña tu contrariedad. Para nada, ninguno de los autores a los que has hecho mención supera ninguna de las tesis y trabajos de los historiadores mencionados por mí.

NB: Javier Tussel, aquel que un día se creyó ser el nuevo Ortega, no era como bien has dicho de izquierdas, pero tampoco de derechas. Se arrimó a PRISA cuando quiso y traicionó a los suyos cuando le convino. Que Dios lo tenga en su gloria...