¡A Bulgaria, todos a Bulgaria! Asco, repugnancia y vergüenza.

Tras la farsa de Valladolid de la pasada semana, en la que los principales caudillos del Pp (salvo Aguirre y San Gil) mostraron su pública adhesión a la candidatura única de Rajoy a presidir lo que antes fue el partido de Aznar, ayer en Murcia, los chicos de Valcárcel, junto con la pareja de "Morancos" (Uriarte y su secretario gral.), hicieron entrega al "gran líder", de los avales procedentes de las NNGG.

Sobre la oportunidad perdida por las NNGG de hacerse valer como una organización reivindicativa y crítica con el partido, queda todo dicho. Han demostrado que a serviles, no les gana nadie ¿juventud las NNGG?, no son dignos. La unión Rajoy-Uriarte es la unión de los perdedores; ni uno ni otro jugaron su papel en las pasadas elecciones. Ni Rajoy logró movilizar mejor que la izquierda ni Uriarte supo hacer lo propio con la juventud y nuevos votantes. Esa fue la razón de la pérdida de las elecciones, y no cuestiones de mensaje.

Con estas, el panorama se presenta demasiado complicado. El discurso de Rajoy en Murcia, fue de lo más asqueroso de lo que se le ha oído en los últimos días: "hablar con todos, sin excepciones, y hacer un partido de centro que haga un esfuerzo por entender a todos".

Así Rajoy, nos está diciendo que nos vayamos acostumbrando desde ya, a llevarnos bien con los racistas del PNV, que apoyan a la ETA para que no se vaya del Parlamento y del resto de las instituciones, y presentan además un plan rupturista y separatista. Después, con los adinerados y burguesones políticos de CIU, principales responsables junto a Zp, del Estatut anti-español y firmantes del pacto del Tinell, donde se excluía de todo acuerdo al Pp. De la ERC y el BNG, aunque me cueste pensarlo, no dudaría nada, a dia de hoy, de que el centrista Rajoy, también hará un esfuerzo por entenderse con ellos. Vamos, unos socios de lo más leales, fieles y respetuosos con la Constitución.

¿Qué quiere decir esto?, ¿que los que nos echamos a la calle a protestar con las víctimas, contra la política anti todo de los socialistas, estamos equivocados? ¿qué cuando plantábamos cara a los planteamientos de la izquierda, en contra del Estatut, contra la negociación, o contra la EpC, errábamos?.

El nuevo Rajoy quiere hacer tabla rasa con su pasado. Va a por el partido liberal y nacional que comenzó a forjar Aznar. Fraga es su guia (nada menos). Y los militantes, su gran mayoría, así como sus jefezuelos, prestos, para no caerse del carro, a colaborar en tal empresa. Lo dicho, ¡asco, repugnancia y vergüenza!.