lunes, 23 de abril de 2007

Un soplo de esperanza

La primera vuelta de las elecciones presidenciales francesas, ha dejado el resultado previsible de un cara a cara entre el líder conservador Nicolas Sarkozy y la candidata socialista, S. Royal, en unos comicios con una cifra histórica de participación ciudadana (cercana al 84%), que esperan mantener de cara a la cita del próximo 6 de mayo.

Yo de ser francés lo tendría bastante claro, pero estos franceses, parecen no darse cuenta de lo que nos jugamos todos y hacen recordar lo que en su tiempo escribió Schopenhauer: unas partes del mundo tienen monos; Europa tiene franceses. Una cosa compensa la otra. Aun así, creo que mi favorito, Sarkozy, ha conseguido ya una victoria moral, una victoria que no se ha de cifrar en número de votos, sino que pertenece al mundo de las ideas. Ésta ha sido la suya: hacernos comprender que en este Occidente infectado de relativismo, donde el anti-capitalismo y anti-americanismo son la nota predominante de muchos gobiernos, y en el que la izquierda se ha adueñado de lo legítimo y nos dice lo que está bien y lo que está mal, es capaz de renacer de su propia miseria (de aquella decadencia anunciada por Splenger) y marcar un nuevo ritmo, valiente y sin complejos, para llegar a tiempo de salvar todavía algo.
Mi deseo de que con Sarkozy, desde Francia, comience una nueva Europa, con el revitalizado eje (ya celebrado por algunos) Francia-Alemania, al que esperamos con todas nuestras ganas, pueda sumarse el próximo año, Mariano Rajoy.

2 comentarios:

Imperator dijo...

Rajoy debería aprender algunas cosas de Sarkozy, a mi me recuerda a Aznar en bastantes ademanes como expongo en mi blog, esperemos que sea el retroceso del socialismo demagógo también en España.

Critón dijo...

Muchas gracias imperator. Así espero yo también. He leído tu columna sobre Sarkozy y me ha parecido muy interesante. Saludos.